Y ya que estamos de propuestas y escapadas, os animo a que veáis algo diferente en la mítica sala Galileo Galilei, que ofrece todos los domingos música y baile orientales para animar las noches madrileñas. En un ambiente entre variété parisino y bar de la esquina se abren paso las odaliscas de Arabbia enfundadas en cascabeles y brillantina. Al ritmo de golpes de cadera y senos oscilantes me olvido por un minuto de Haití, de Irán, de Corea y de amenazas varias y me dedico al dulce placer de mirar sin reflexionar nada a cambio. Hoy en día es un regalo, que digo un regalo, un lujo, eso de asistir a un espectáculo y no tener que pensar. Basta con algo tan básico que ya de bebé sabía hacer: mano con mano, palmas palmitas... ¡Ah! ¡Qué descanso! ¡Qué felicidad!
Bailarinas de Danza Saidi en Galileo Galiei. Foto: BeaBurgos
El próximo sábado 30 de enero la Sala Galileo Galilei organiza una velada especial de danza Oriental por Haití.
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